Felicidad, ese estado mental


La felicidad es un estado mental, cada día estoy más segura. Creo que si algo me caracteriza es que soy una persona bastante feliz, risueña y optimista. Algo que, aunque cueste creerlo, despierta a veces el recelo de la gente. Llevar una sonrisa por defecto en el rostro a menudo se confunde con falsedad o inmadurez. Aún así, no puedo evitarlo, soy feliz.

En ocasiones esa felicidad se multiplica y lo notas desde el minuto uno. Pequeños detalles que te ponen una sonrisa en la cara y te llenan de energía para afrontar todo lo que tenga que venir, nada importa, ese día te pertenece.

Hoy ha sido uno de esos días. Hoy el sol ha brillado más, aunque estemos en pleno noviembre. Hoy ha hecho un calor agradable que rozaba mi piel gracias al viento susurrante. La primera canción que ha sonado en la radio me encantaba y la última que he escuchado al conducir hasta casa, también.

Hoy todas las cosas han salido bien, muy bien, maravillosamente bien. Hoy he recibido palabras preciosas de amigos, conocidos y desconocidos. Hoy he conversado con 'hermanos' del alma que hacía tiempo que no veía y me han recordado lo maravillosa que es nuestra amistad (Aunque yo sea un desastre con patas algo desapegada a veces).

Hoy he cantado mentalmente sin parar una canción que me recuerda a ti. Hoy me han recordado el significado de la palabra compartir... Hoy no he podido parar de sonreír.

Que inconmensurable verdad es que todo lo que das acaba volviendo a ti. Y este año he debido de ser muy buena, porque llevo meses de auténtica, pura y maravillosa magia. Gracias Universo, gracias, vida, soy feliz.

0 comentarios:

Publicar un comentario